En un mundo perfecto los animales vivirian en libertad: criando y siguiendo sus instintos naturales. Sin embargo, perros y gatos no pueden sobrevivir sin nuestra ayuda, por lo que debemos cuidar al maximo.
Un gesto tan simple como adoptar a un perro o gato de un refugio o protectora hace la diferencia entra la vida o la muerte para esos animales. Es también muy importante que dejemos de reproducir a los animales, pues de esa manera se controla la sobrepoblación y el abandono.
La triste realidad es que no todo el mundo ama a los animales. Cientos de animales son encontrados golpeados, hambrientos y enfermos; camadas de cachorritos y gatitos son rescatados de cajas cerradas con cinta al costado de la carretera, o de bolsas cerradas herm?ticamente que son arrojadas en la basura; perros abandonados porque “ladran mucho”, o porque estan viejos, o porque la familia se está mudando.
Aun las personas que se preocupan por los animales muchas veces no saben reconocer o cumplir con muchas de sus necesidades. Los animales domesticos no pueden sobrevivir por sus propios medios, y sin embargo mantienen muchos de sus instintos básicos e impulsos. Por lo general, no realizan actividades naturales: por razones de seguridad, se los encierra en una casa o patio trasero, siempre dependiendo de sus dueños hasta para tomar un trago de agua, para conseguir alimento o para relacionarse con miembros de su especie.
Mientras la gente trate a los animales como juguetes, propiedades y objetos, y no como individuos que tienen sentimientos, familias y amigos, el descuido y abuso generalizado continuaran.
Fuente: PETA